Simplemente te extraño

Me siento a escribir para descargar eso que me pasa. Y transformo las lágrimas que no puedo dejar caer en tinta virtual. No pretendo que sean comprendidas, solo escuchadas.
Y van cayendo por mis dedos de la misma manera que recorrerían mi rostro en este momento.
Mis pulmones se llenan de aire como hace rato que no lo hacían al ver las letras en esta enorme pantalla. Y aunque las acompañaría con un cigarrillo, no lo hago porque todo lo escondo.
Antes podía hacer pequeños análisis de lo que me pasaba, ahora solo escribo y escribo, porque ni yo puedo entenderme.
Estoy tan confundida, tan negada, tan ciega.
No dudo de lo que siento, pero me confunde tu manera de ser, me ata a la nada, me quita esperanza, me deja esperando que el tiempo pase y que todo sea como alguna vez lo sentí.
¿Qué me pasa con vos?, ¿Qué me pasa?
Y siento que por esta pantalla no soy capaz de decirte nada y me enojo conmigo misma, con vos, con el resto del universo por ser tan estúpida, por no poder ser yo.
Por no poder ser la tonta que te hacía reír, y ser esta tonta que ultimamente te imagina sin ganas de verme, sin ganas de mi, sin ganas de nada.
Sí, ya se, no se lo que sentís, pero tampoco puedo saberlo estando a cientos de quilómetros de distancia de tu boca, de tu piel.
Y es esa incertidumbre la que destruye mis ganas, la que me hace cometer errores y perseguirme todo el tiempo. Y esa misma incertidumbre me está matando por dentro y no me deja decirte que te quiero, que te necesito, que quiero que vuelvas a ser lo que eras, que todo sea como antes, cuando podía ver tu cara, oler tu piel, sentir tu alma...
Creo que simplemente te extraño.

Solo escribo lo que sale III

Hace tanto tiempo que no me pregunto porque se dan las cosas, que ya me había olvidado que lo que alguna vez ame se terminó por algo que jamás sucedió.
Hace tanto tiempo que no amo con tanta intensidad que ya ni recuerdo como era.
Hace tanto tiempo que no soy verdaderamente feliz amando que creo que eso no existe.
Hace tanto tiempo que sufro por haber amado lo imposible, querer lo complicado, que ya no se si quiero amar nuevamente.
Hace tanto tiempo...

otra vez de vos

Como un filón de letras torcidas veo mi cuerpo,
en el vaivén de la tarde soñada de vos.
Suspiro harta de tanta espera,
corro cansada al elevador.

Dibujo botones que me lleven al cielo,
dibujo un mantel con una única flor.
Planeo quitarte el aire de apoco
con un beso cargado de rayos de sol.

Y ahí reposa tu cuerpo dorado
y mis oídos escuchan tu respiración.
Mis manos se deslizan por todo tu cuerpo
mis manos se acuerdan otra vez de vos.

Solo lo que sale hoy II

¿Cuándo voy a pensar en mi? será que pienso tanto en los demás que me olvido de mi misma?
La verdad no lo sé, tema de diván seguramente...
Tema que ya me tiene HARTA

Una gota de agua

Si solo fuese una gota de agua, sólo una.

Una gota transparente, fría y delicada.

Una gota insípida, sólo una gota.

¿Y si esa gota cambiara tu instante y lo convirtiera en años?

¿Y si esa gota te daría paz?

¿Qué pasaría con esa gota?

No quisieras que se derrame por tu cuerpo y desaparezca.

No quisieras que se evapore con el sol.

Simplemente no quisieras que se vaya de tu lado.

Pero sabés que es una gota y tarde o temprano se irá sin razón.

De mal humor

Tengo la necesidad de gritar, de decirle a todo el mundo que estoy cansada
Pero tan cansada estoy que no tengo las fuerzas suficientes para hacerlo.
Vengo acarreando opiniones que sin ser para mi tocan el fondo de mi alma,
y callo para no discutir sobre algo que muy pocos entienden.
Aunque pienso que mis pensamientos están más allá de los suyos, que son absurdos, los respeto.
Y juego un leruleru mental, obviamente, callada.
No es que no los escuche, simplemente no me interesan porque hoy se lo que quiero.
Ya no siento ni derecho a despertarme de mal humor y esperar a que se me pase escuchando una canción o simplemente mirando al techo.
Y ese mal humor que atosiga todo mi ser no me deja compartir, no me deja expresarme, me golpea por dentro, pero me mantengo callada y hago como que los escucho.
Y aunque ya casi no tolero ni el timbre de sus voces pongo cara de complacida y de felicidad, aunque por dentro me esté muriendo del dolor.
Claro ellos no lo saben, no saben nada de mi, ellos creen saberlo todo pero solo conocen lo que no soy, lo que ellos quieren que sea, "lo que está bien".
Y a pesar de sentirme tan distinta a todos ellos, de ser la rara, la solitaria, los amo.

lloremos

Ahí en el camino cercano a tu mirada, ahí en las angustias de tus ojos es donde te encuentro, confío en tus palabras y las leo en un xilofón de llanto.
Y te abrazo, y le pido a algo que no existe que te de fortaleza. Me vuelvo crédula por un instante si eso te va a devolver la alegría.
Te pido que no llores, aunque se que es en vano, pero lo digo y me siento estúpida al hacerlo.
Y jugando a hacerme la sabia te doy consejos que seguramente no vas a tomar, pero en ese momento te calman y yo me siento gigante.
Pero es así, el dolor nos invade, pero qué más da!! si nacimos sufriendo, con un gran llanto que nos trajo al mundo y nos hizo vivir por primera vez...
Lloremos, desagotemos nuestro ser, vaciémonos de dolor, siempre es necesario sentirse vivo!!!

Vi está imagen y por primera vez me reí de lo que ya denominé "el trauma del último orejón del tarro" (patología que me aqueja hace varios años). A veces está bueno tomarse las cosas con humor...

el último orejón del tarro

No es uno, son veinte millones de palos en mi rueda, palos que no quieren salir, palos que no dejo de sacar todo el tiempo, a cada rato, todos los días del año.
Y así estoy, dos pasos adelante y cuatro para atrás.
Y cuando dejo de pensar en los palos, empiezo a construir algo hermoso, ladrillo por ladrillo, una de cal y otra de arena, pero todo se cae al instante mismo en que pego el último.
Y es en ese momento en que me siento el último orejón del tarro, ese que nadie quiere agarrar, ese que está lleno de gusanos putrefactos.
Y eso me pasa por ser tan visceral, por dejarme llevar y no pensar, por querer sentir todo el tiempo.
Pero que le voy a hacer!, soy así y así me enamoro y sufro. Pero nunca aprendo mi lección y sigo comentiendo los mismos errores que me llevan a pensar en los demás siempre más que en mí, aunque una manada de elefantes esté pisando muy fuerte mi cabeza y mi alma.
Y así es como sucede, así es como me convierto en el último orejón del tarro, ese que nadie quiere tomar, ese que tal vez alguien muerde y escupe a pesar de tener un sabor agradable.

De ella

Hay un cielo ahí afuera
con sus planetas visibles colgando...
Hay un mundo visible
como un decorado de feria!
Y una montaña de vidas
que con respirar ya se conformaría...
Por respirar, por confiar de nuevo y volver a creer.!
Por respirar serena y saber esperar..
Como se cruzan las carreteras
para después volver a separarse,
se cruzaron tu vida y la mía;
dardos hacia la diana de nuestra lotería
¿Por que se cruzan las vidas que se tocan
y luego vuelven a separarse?
Un filón de suertes que se mezclan...............aldana


Gracias Baby, me encantó

Miedo

No puedo evitar sentir miedo al besarte, temo tu ausencia mañana.
Miedo al no verte en mi cama al despertar,simple dolor en mi pecho.
Locura de sábanas enredadas entre tus piernas sacuden mi realidad infinita.
Pasión que anhelo despierta, juego de besos en calesita.
Y aunque lo peor ocurra, lo enfrento. Dejo atrás mis impulsos y por un instante congelo mi alma.
Pienso que nada ocurre y sigo tus instrucciones al pie de la letra.
Y aunque tu locura vuela mis pelos, tenés el poder de cambiarme.
Y ese miedo que sucumbe mi pecho ya no hace tanto alarde.