miércoles, 29 de diciembre de 2010

Lienzo casi infinito


Entre botes de pintura y barquitos de papel pinto un sol en tu estómago. Y cuando el río de oleo recorre tu piel tersa mi pincel pentatónico te acaricia bailando un vals en otoño.
Ni Mozart ni Chopin podrían escuchar como yo la melodía de tus besos, ni el compás de tu corazón latiendo junto al mio.
Entre pinceladas de pasión voy delineando todos nuestros sueños con un trazo perfecto, mientras descubro que somos un único lienzo, casi infinito.
Sos mi musa inspiradora. Mi maja desnuda y también vestida. La única capaz de transformar mi escala cromática apagada en una paleta de colores vibrantes y vivos.
Gracias a vos y al arte de amar mi vida ya no es solo leer para olvidar. En cada rima dibujo tu sonrisa, y en cada párrafo te veo en mi historia. Protagonista de todos mis cuentos, mi princesa, estás siempre en mi memoria.


Para ella, como todo lo que hago. Te amo

4 comentarios:

Lucía dijo...

La poeta se tomó las pastillitas del abuelo, para recorrer con pasteles al óleo el liezo de su amor.

Seguro Beethoven te entiende. ;)

Anónimo dijo...

Qué ternura.

cosasimpropias dijo...

veo que vos tb venis a medio publicar... te mando un saludo!

Micaela dijo...

Gracias por pasar. Cosasimpropias:si, cada vez escribo menos. Cada vez me conecto menos. Cada vez menos. No es algo de lo que me sienta orgullosa.
Otro saludo para vos!